Aproximadamente en el año
1860 se intentó refinar la raza incorporando cruces con English White Terrier
y, posiblemente, con Dálmata y Pointer español. El resultado fue un perro
de color blanco, muy musculoso y dotado de una cabeza muy bien definida. Además,
poseía las patas más cortas que las de sus antecesores. Posteriormente, en
la década de los 20 del presente siglo, se introdujo un toque de color en
el pelo con el fin de evitar la tendencia a la sordera de las razas albinas.
Estándar:
Esta raza de perro posee una estatura de entre 36 y 39 cm. y un peso de entre
23,5 y 29 Kg. En cuanto a las características de su cuerpo, éste es un animal
fuerte y potente, lo cual se refleja especialmente en su cabeza, que tiene
una forma ovalada y larga, sin stop.
Asimismo, sus mandíbulas son muy potentes, con mordida de tijera, y sus dientes
suelen ser sanos y regulares. Continuando con la zona facial, los ojos del
Bullterrier son oscuros y pequeños, en forma de almendra. La distancia desde
la punta de la nariz hasta los ojos, debe ser mayor que la que hay desde los
ojos a la parte superior del cráneo. Por su parte, las fosas nasales se presentan
bien desarrolladas y el maxilar sólido y vigoroso.